Tina acaba de conseguir el puesto de jefa de su restaurante favorito. Poco a poco, va a aprendiendo truquillos de su nuevo trabajo. Recibir a los clientes, sentarlos, tomar nota de su pedido y traérselo después, sin olvidarse de nadie. Se enorgullece de lo bien que atiende a los clientes, sirviéndoles siempre rápido y sin equivocarse de plato nunca. ¡Y está funcionando! Satisfechos, los clientes recomiendan el restaurante a sus amigos, ¡y el éxito está siendo imparable!
¡Psst! Restaurante Miami es una pasada, pero los mejores juegos de restaurantes están en mi colección personal. ¡No te los pierdas!