Fred es un conejo suave que llevaba una vida feliz en su chistera. ¡Hasta que se tragó una mano sin querer! Sí, una mano, entera. Bueno, era una manita chiquitita y llevaba un guante. ¡Podría haber sido una galleta! En fin, vas a tener que abrirlo y sacarle la mano de la tripa. Lo más importante es darle la medicina por dentro a Fred antes de coserlo. ¡Pronto volverá a brincar como por arte de magia!
¡Psst! Operar a animales es una pasada, pero los mejores juegos de operar están en mi colección personal. ¡No te los pierdas!