La princesa Alondra se negaba a pedir las cosas con cortesía. Un día, tropezó con el caldero de una bruja y la bruja, llena de ira, le echó un maleficio por malcriada. A partir de ese día, se llamaría princesa Por Favor, y quedaría convertida en piedra hasta que alguien pronunciara esas palabras. ¿Acompañas a su príncipe a salvar a la princesa Por Favor?
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