Amamos los cupcakes. Los comeríamos día y noche. ¿Tú también? Mmm, ¿te obsesionan tanto como para pasarte el día preparando y vendiendo pastelitos? No te precipites, ¡es un trabajo arduo! A ver si completas los pedidos sin que los clientes se marchen enfurruñados…
¡Psst! El puesto de cupcakes es una pasada, pero los mejores juegos de cocina están en mi colección personal. ¡No te los pierdas!