Es una persecución a toda velocidad por la carretera, entre las fuerzas de seguridad y unos jóvenes traviesos. ¿Que qué han hecho? ¡Se han colado en una oficina para hacer una fiesta! Ahora les persigue un helicóptero de policía, y ellos han tenido que montarse en el coche, pisar el pedal a fondo y acelerar todo lo posible. Mientras uno de ellos conduce, los pasajeros del asiento trasero parece que tienen otra preocupación… ¡ayuda a la parejita a besarse sin que les vean el piloto ni el copiloto!