Lo mío eran los experimentos de química, pero también me lo pasaba genial en plástica. Cuando tuve que decidir qué estudiar, no sabía qué hacer: ¿qué rama escogía?
Hubo momentos en los que me daba un poco de miedo meterme a ciencias. Nadie me dijo nunca directamente que fueran cosa de chicos, pero era una idea que nos hacíamos muchas en mi clase, sin darnos cuenta. Por eso quiero enseñaros hasta qué punto esas ideas son equivocadas. ¡Las chicas pintamos mucho en el mundo de la ciencia!
Ha habido muchísimas mujeres que han hecho historia. No me voy a poner a nombrarlas a todas, pero os hago una lista de las 3 mujeres que más me inspiran:
Hay científicos de todas las formas y tamaños, tanto hombres como mujeres. Hay jóvenes, ancianos, madres de familia… Alguno habrá que esté un poco tarado, pero te puedo asegurar que los científicos reales suelen ser gente normal.
El 51% de los estudiantes de doctorado en España son chicas, pero solo el 39% de los investigadores son mujeres.
La buena noticia es que es solo un problema de perspectiva. Muchas chicas no creen que puedan tener una carrera científica porque lo ven como un ámbito dominado por los hombres. Pero en el mundo científico se sabe de sobra que la capacidad de un investigador no depende de su género, sino de su experiencia y su esfuerzo.
La ciencia es un poco como la magia: si no te sabes el truco, ¡parece imposible! Dedicarse a la ciencia significa empujar los límites de lo posible y descubrir las respuestas con las que nadie ha dado aún.
¿Cómo puede el ser humano llegar a la Luna? ¿Cómo podemos teñirnos el pelo? ¿Cómo se cura una enfermedad? Podemos porque en algún momento alguien decidió hacerlo posible.
Para ser una buena científica, se necesita:
Si tienes estas cualidades, ¡puede que la ciencia sea lo tuyo!
Y ya os oigo decir a algunas: “Lee, todo esto está muy bien, y me encantaría descubrir cómo hacer que el repollo sepa a patatas fritas, pero es que veo la tabla periódica y me entran los siete males.”
Pues, hablando de repollo, olvídate de la tabla periódica y mira un poco de química en acción. Es más, te recomiendo que lo pruebes en casa.
¿Has visto alguna vez las palabras «pH neutro» en un bote de jabón? El pH mide lo ácido o alcalino que es algo. En el caso de los jabones suele ser muy alto (alcalino), lo cual es agresivo para la piel humana. Los jabones con pH neutro tienen un pH similar al de nuestra piel (que es 5,5).
Ahora, si quieres saber cómo es el pH de tus jabones, colonias, lociones, cremas y demás… ya sabes cómo comprobarlo :).
Cosmética, salud, nuevas tecnologías, energías renovables, agricultura… ¡Hay muchísimos ámbitos en los que la ciencia sigue aportando avances constantemente! Cada día es un nuevo desafío, con nuevas cosas que inventar y nuevas soluciones que descubrir. Cada día, miles científicos están cambiando el mundo mientras tú y yo hablamos.